Sales de una reunión cabizbajo y uno de tus socios os invita a ti y a otro compañero a escuchar en su coche música maravillosa, un aria a dos voces en el que se produce un místico final con la Caballé en delicioso clímax. Punto y aparte. Respiras emoción, respiras de otro modo al salir de allí.

A continuación, a este otro socio has de llevarlo en tu vehículo hasta sus oficinas a continuar sus quehaceres laborales e inicia, intencionadamente, una conversación que te conduce a relativizar la problemática que te acuciaba en esa jornada, un tanto trastocada, y al despediros ya te encuentras mejor todavía.

Más tarde, hacia la noche, recibes una llamada de alguien que se ha acordado de ti, otro de tus socios que, al cruzarse contigo al mediodía, no te había visto en el mejor de tus días y todo cobra otra dimensión. Te llama para felicitarte por un trabajo y para ponerse a tu disposición si en algo te hiciera falta. El día ha cambiado definitivamente.

¡Qué suerte tener amigos así de detallistas! ¡Qué bendición rodearte de personas que dedican unos minutos de su tiempo al apoyo cuando lo detectan necesario! ¡ Qué gran lección y qué sutil toque de atención!

Gracias, piensas. Gracias, sientes. Unos gestos, unos detalles y el viento sopla de nuevo en la dirección correcta, invitándote a retomar el mando de la nave y a seguir tu rumbo, henchido, sin desfallecer ante nada.

El que no sabe más, de todo es disculpado, pero aquél que se ha formado en aspectos de mejora personal ya no puede dejar de lado cualquier resquicio que se le presente abierto para ayudar a los demás. El que se especializa en ayudarse a sí mismo, se completa en los otros y no hay marcha atrás. Comprobarlo en primera persona es extraordinario.

Con este sencillo escrito dejo dicho lo más importante  que me ha aportado buscar mi máximo potencial: el secreto está en nosotros y al cultivarlo se proyecta en los demás.

Pero lo más importante que me ha sucedido ha sido convivir con un grupo de referencia como vosotros, queridos miembros de Máximo Potencial, gente con unos estándares de vida  de altísima calidad en todos los aspectos que me está llevando hacia lo mejor de mí y a vivencias imborrables; bueno, lo que vengo a querer decir es lo fecundo que resulta un grupo de amigos de verdad, como vosotros. Y es algo que merece la pena airear.

Gracias y un abrazo, caballeros.

(*) Fotografía : Ángelgrubio (Flickr)

0 comentarios de “La importancia de los detalles

  1. Josep Sanvisens dice:

    Estos escritos en maximopotencial también son un detalle que no podreis saber nunca a cuantas personas benefician y hasta dónde.
    Seguramente que hoy, alguien influenciado por tu escrito llamará a un amigo que se siente abatido. Y tu José Manuel, no lo sabrás.
    Si me lo permites me quedo con tu frase de: El secreto está en nosotros y al cultivarlo se proyecta en los demás. En definitiva, ser mejores para ayudar a los demás a ser mejores ¡Esta es la clave!
    ¡UN ABRAZO!

  2. Máximo Miralles Rodriguez dice:

    LOS detalles marcan la diferencia, esa es la verdad verdadera, es cierto, es realidad, es certeza, Jose Manuel, solo los excelentes lo saben…. pero los detalles marcan la diferencia, gracias Jose Manuel eres una persona maravillosa, atareada en exceso pero maravillosa. UN ABRAS CAMPIO.

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