Estoy escuchando al magistral David Bowie (una de mis debilidades…) y todo se vuelve relativo: “Young Americans”, “Changes”, “Time” o “Rebel, rebel”. Y después de diez años sin aparecer por la escena, con una edad jubilada según los cánones, brilla de nuevo con un nuevo álbum estelar preguntándonos dónde estamos ahora, su primer single.
La edad en que me encuentro yo y la mayoría de nosotros es la mediana edad. Ni poco, ni mucho. Ni un chaval, ni un anciano. Con fuerzas todavía y con un cierto bagaje ya acumulado, pero con una única posibilidad: no hay más remedio que empujar. Los de antes ya no pueden, los que vinieron después esperan confiados en que lo hagas… Sí, amigo, ¡estamos en medio de todo! ¡En todo el tomate! (como me dijo un amigo el otro día).
Pues si no hay alternativa, disfrutémoslo que por algo será. La Naturaleza es sabia. Prefiero pensar que, llegado este momento, se trata de la posibilidad de aprovechar las nuevas oportunidades en su justa medida y con un equilibrio que las optimice, ahora sí, en todos sus campos. Y creer firmemente en ello me hace sentirme bien y, cuanto menos, predisponerme a que así sea.
Pensar que antes no lo hice todo bien porque no era necesario y que la madurez me está alcanzando en estos tiempos, no cuando se le esperaba, me relaja y me auto brinda la transigencia necesaria para conmigo mismo, pero también me hace fuerte en el uso de todos mis recursos: ¿alguien duda de que no vamos a dejar escapar este tren?
Y si así sucediera, volvería a escuchar al “Duque Blanco” y me daría cuenta de que nunca es tarde para volver a la estación de la creatividad y las propuestas comprometidas y de calidad, donde siempre hay trenes previstos para cualquiera con suficiente similitud al gran “Camaleón”, con su constante vigor para innovar y cambiar de registro: realmente, percibo hoy con claridad meridiana que siempre ha sido un hombre de vanguardia a fuerza de crearla, algo digno de considerarle como un avanzado a su tiempo.
Pero…¿y nosotros?
“Where are we now? Where are we now?
The moment you know, you know, you know…”
Tengo un amigo que cuando cumplió 60 años le preguntaron: ¿Le gustaria volver a tener 25 años? ¡No! Respodió. ¿Porque no? fué la siguiente pregunta y respondió: Porque la experiéncia de tener 25 años ya la viví, ya la disfruté, ya se como fué. En cambio la experiéncia de vivir los 60 años es nueva para mi, también quiero saber como es, también quiero disfrutarla y me ilusiona vivirla. Nunca he olvidado esta respuesta.
GRACIAS POR ESCRIBIR