Según las estadísticas, septiembre es el mes de las rupturas sentimentales. Uno de cada tres divorcios se produce en esta época. No, tranquilos, no vamos a analizar en este foro las posibles causas de ello. Lo que vamos a hacer es justo lo contrario: intentar aportar la clave que, según Plutarco (50-120 d.C.) llevaba a un matrimonio al éxito.

Para el filósofo clásico, la base de cualquier proyecto de vida en común es la GENEROSIDAD. Y esa generosidad debe llevarse hasta sus últimas consecuencias, hasta conseguir ambos miembros de la pareja consigan una «fusión de cuerpos»:

Así como nos dicen los físicos que los líquidos pueden mezclarse completamente unos con otros, así también entre los cónyuges tiene que haber una mutua fusión de sus cuerpos, posesiones y relaciones. Y por eso prohibió la legislación romana que los casados se hagan obsequios, no para impedir que reciban nada el uno del otro, sino para sentir que todas las cosas las comparten en común.”

La idea no es original de Plutarco, pues ya Platón, en su obra maestra, La República, hizo una interesante metáfora entre ciudad y matrimonio. Según el sabio ateniense, es feliz y afortunada la ciudad en que no se oye decir “esto es mío” “esto no es mío” porque los ciudadanos disfrutan en común y en la medida de los posible de todas las cosas importantes. Pero es sobre todo del matrimonio de donde hay que desterrar estos conceptos.

Hoy día, cuando las leyes tienden cada vez a crear patrimonios independientes de cada cónyuge, puede chirriar que esa fusión abarque también a los bienes materiales. Sin embargo, como siempre decimos, se trata de una visión más, en este caso del matrimonio…pero es la visión de Plutarco.

(*) Fotografía : Katsunojiri (Flickr)

0 comentarios de “El matrimonio es una fusión de cuerpos, posesiones y relaciones, según Plutarco

  1. Josep Sanvisens dice:

    Son interesantes las visiones sabias de los clàsicos, por eso han perdurado. En mi opinión es muy importante la fusión de dos personas en el matrimonio siempre que no se necesiten para complementarse la una a la otra, es decir no haya dependéncia ni sometimiento. No creo en lo de la media naranja, todos somos naranjas enteras.
    GRACIAS ORFEO

    • Orfeo dice:

      Es un punto de vista. Sin embargo, hay muchos especialistas que recomiendan que las parejas sean complementarias. Doctores tiene la Iglesia. Quizás lo más importante, como en todo, es que ambos tengan un objetivo común. Gracias por el comentario, Josep.

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