Todos nuestros resultados derivan de nuestras acciones. Por tanto, no resulta extraño detectar cuando observas con detenimiento la dinámica de funcionamiento de cualquier gran realizador, donde reside la clave que marca la diferencia con respecto a la gran mayoría que apenas consigue resultados.
Los grandes realizadores siempre toman ACCIÓN MASIVA.
En contraposición, la persona promedio toma acción de manera tibia o en muchas ocasiones incluso no llega ni siquiera a tomar acción. Una de sus típicas excusas es después de haber intentado dos, tres, o a lo sumo cuatro formas diferentes de hacer algo, decir: «Lo he intentado todo y nada funciona». ¿Todo?… ¿Cuatro intentos son todo?… Todo son millones de opciones posibles. Esa es una típica excusa de perdedor para justificar la falta de resultados.
Los grandes realizadores jamás se «venden a si mismos» esa clase de excusa. Están en movimiento de manera permanente. Si algo no funciona, reflexionan y rápidamente intentan un nuevo enfoque… Y se mantienen así hasta que encuentran la opción adecuada que funciona. Toman constantemente acción MASIVA. No prueban una cosa, dos o tres,… ¡prueban si es necesario miles de opciones! Son conscientes en todo momento a lo largo del camino de que solo una acción masiva y poderosa les llevará hacia sus mayores sueños.Tienen como obsesión crear constantemente inercia positiva hacia sus objetivos.
Si quieres cambiar de manera dramática la clase de resultados que estás obteniendo, una de las grandes claves para lograrlo es esta: conviértete en una persona que toma ACCIÓN MASIVA. Pasa de tomar simplemente acción a tomar acción masiva. Enfrenta cada uno de tus objetivos desde una dinámica activa, poniendo en marcha todo lo necesario para alcanzarlos. No seas tibio o perezoso en tus acciones. Emula a los grandes realizadores y pronto comenzará a descubrir todo un mundo de posibilidades que solo son reveladas a quienes ponen todo su potencial en juego.
Las grandes historias suceden cuando los personajes que intervienen toman ACCIÓN. Y yo añadiría: cuando toman ACCIÓN MASIVA.
Existe una gran diferencia entre uno y otro enfoque.
Son tiempos de ACCIÓN MASIVA.
Que gran editorial, José María, como siempre, lo bordas, si me dejas añadir algo que también creo que es el acompañante ideal de la Acción Masiva es la Pasión y el Entusiasmo, todos los grandes han estado apasionados y gracias a ello han podido saltar todos los obstáculos, mil gracias José.
¡Me alegra que te haya gustado! Y por descontado no puedo estar más que de acuerdo en que si a ese ingrediente que es tomar ACCIÓN MASIVA le añadimos PASIÓN y ENTUSIASMO, estaremos creando un «cocktail» demoledor para lograr increíbles resultados.
¡Qué importante es vivir con pasión y entusiasmo! La experiencia vital se transforma y gana muchísimos enteros.
¡Muchas gracias por el comentario!
El número de objetivos logrados o de éxitos conseguidos, siempre será directamente proporcional a la intensidad del deseo que tengamos y de las acciones que hagamos. ¡Que importante saber qualificar con buen criterio nuestra acción! ¿Es escasa o nula? ¿De intensidad baja o mediana? ¿Masiva? Si observamos los resultados tendremos las respuestas.
GRACIAS JOSÉ Ma.
Así es Josep. Y esto muchas veces va ligado al nivel de estándares que nos fijamos en nuestra vida. Desafortunadamente, son muchísimas las personas que fijan un nivel de estándares muy por debajo de su verdadero potencial. y al final eso les conduce a no producir la calidad de resultados que les llevarían a vivir una vida en sintonía con sus anhelos y aspiraciones. TODOS los grandes realizadores, de un modo u otro, son personas de ACCIÓN, que mantienen estándares de rendimiento por encima de la media.
¡Muchas gracias por el comentario!