¿Qué efectos pueden llegar a ocasionar los recortes sociales?

En esta época que estamos viviendo se habla mucho de “recortes sociales”, de los peligros que parecen acechar al estado de bienestar y del papel que debe jugar el Estado en la protección de los ciudadanos. El debate entre detractores y favorables está de plena actualidad.

En esta tesitura quizás sea interesante conocer una opinión totalmente ajena, pero muy cualificada.

Una de las construcciones argumentales más conocidas de Platón fue su “CIUDAD IDEAL”. Por entonces, ciudad se asimilaba a lo que hoy conocemos como Estado y el genio clásico diseñó las características que éste debía reunir para que su organización fuera perfecta.

Platón parte de una obviedad que hoy parece estar en duda: en una sociedad hay ciudadanos mejores y peores en función de los méritos. Todos somos iguales en derechos, pero esa igualdad no significa que el estado deba reconocer y premiar a todos por igual.

Por tanto, según el ateniense, la ciudad (el estado) no debe prestar todos sus servicios ni hacerse cargo de todos sus ciudadanos, sino únicamente de los mejores. Aquéllos que destacan por ser los más sabios, los mejores atletas, los mejores guardianes, eran los únicos que debían ser criados y educados por el Estado. A ellos debía dedicar el Estado sus recursos, porque ellos serían los destinados a gobernar, a liderar la sociedad y, en última instancia, a generar nuevos recursos.

Así expresada, la idea puede chirriar en nuestros oídos. Hoy día se utiliza el criterio selectivo de la necesidad: el estado debe ayudar a quien más lo necesita. El criterio que propugnaba Platón es el del mérito: el estado debe ayudar a quien más lo merece, porque al propio estado (a toda la sociedad en definitiva) así le interesa.

Es una opinión. Pero es la de Platón.

0 comentarios de “Los recortes sociales y Platón: «El Estado solo se debe hacer cargo de los mejores»

  1. Josep Sanvisens dice:

    Este tema levanta comentarios de todo tipo.
    Enfocado a los estudios, en mis tiempos, para conceder una beca se consideraba ambos factores. Los resultados conseguidos vistos en las calificaciones y la situación económica de la familia. Combinar ambos criterios no me parece nada mal.
    GRACIAS POR ESCRIBIR

    • Orfeo dice:

      Ahí está la clave, Josep: en el equilibrio (o término medio que decía Aristóteles) entre ambos factores, es decir, entre lo que decían los sabios clásicos y las circunstancias actuales.
      Debemos saber lo que se dijo en la época más gloriosa de concentración de talento que la humanidad jamás ha conocido. Y después, saber extraer las lecciones que, debidamente adaptadas, puedan servir hoy día.

  2. Modesto dice:

    El mérito y ayudar a quien más lo merece del que habla Platón me recuerda a la historia de Margaret Thatcher por la que se ganó el apodo de «la ladrona de leche»…

  3. Señor Burn`s dice:

    De hecho vivimos en una época de meritocracia, donde los mejores son despreciados y los mejor adaptados al tiempo de enchufismos y chanchulleos los mejor pagados ¿que vemos cada día en tv en prensa….

    LA REPÚBLICA la cosa publica de la que escribió Platón hoy es insultada, menoscabada, especulada y desahuciada, de hecho la misma democracia de hoy es un chiste con la propugnada en un tiempo donde el esclavo existía

    • Orfeo dice:

      Buena manera de definirlo: «adaptados al tiempo de enchufismos y chanchulleos». En aquella época tampoco se libraban de sus particulares crisis. La diferencia (al margen de que efectivamente nuestra democracia es una caricatura de aquélla) es que entonces había líderes morales como Platón, que decían cosas como que «habrá crisis mientras no gobiernen los mejores. Gracias por escribir.

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