Wayne Dyer no ha muerto, ha pasado a una nueva existencia.
Ese es el mensaje con el que la familia del genio de Detroit anunció su fallecimiento.
Nacido en 1940, se crio en orfanatos y hogares de acogida, lo que no le impidió varios años después licenciarse y doctorarse en la Universidad.
Se trata de uno de los grandes autores de la temática de superación personal, con más de 40 libros a sus espaldas, muchos de ellos grandes bestsellers imprescindibles en la biblioteca de millones de personas de todo el mundo.
Destacó por la sencillez del mensaje, que transmitía con una impactante paz y serenidad, a la vez que cargado de un tremendo poder inspirador. No en vano, se le ha llegado a llamar “El padre de la motivación”.
Para los miembros de MÁXIMO POTENCIAL fue uno de nuestros grandes inspiradores. Alguno de sus libros más conocidos como “Tus zonas erróneas” figuran en la lista que hemos publicado en este blog de las obras más determinantes de la historia de la literatura de superación personal. Aquí tenéis una video-reseña:
Otra de sus grandes obras, “El cambio”, fue llevada a un impactante documental protagonizado por el propio Dyer, que MÁXIMO POTENCIAL proyectó en pantalla gigante el pasado 3 de marzo de 2015 y en torno al que organizamos dos interesantes charla-coloquios con José María Vicedo y Javier Iriondo. Todavía no podemos confirmar fecha, pero repetiremos este evento en varias ciudades de España.
Ahora, llegado el momento de su partida, asaltan a la memoria de sus fieles seguidores, frases como esta:
«No somos seres humanos teniendo una experiencia espiritual, somos seres espirituales teniendo una experiencia humana».
Con ello, Dyer dejó bien claro que no tenía miedo a la muerte. Es más, llegó a confesar que tenía gran curiosidad por pasar a su nueva existencia. Decía que de momento estaba utilizando ese cuerpo, pero que su espíritu perduraría.
Esperemos que así sea. Desde MÁXIMO POTENCIAL solo nos cabe, en primer lugar, decir GRACIAS; y a continuación, comprometernos a seguir honrando su memoria como uno de los inspiradores de nuestro proyecto.
Como ha dicho su familia, sonreímos de pensar cuánto disfrutará en la otra vida.
los amo
Recordaré siempre la sensación de paz que este hombre transmitía. Será que vivía en la verdad? Prosiga en paz.
Gracias por este artículo tan pertinente.
En mi opinión, la imagen que mejor representa esa paz de la que hablas, querido José Manuel, es una de las primeras de la película El cambio. Se levanta de la cama Wayne Dyer a una hora intempestiva, pone los pies en el suelo y dice: «Gracias, gracias, gracias»
Si, somos seres espirituales teniendo una experiencia humana.
El dia que seamos mayoria las personas que aceptemos y vivamos de acuerdo con este pensamiento, el mundo cambiará. Habrá mucho mas amor y menos miedo.
Aportemos nuestra contribución para que así sea y que Wayne Dyer nos sirva de referente.
¡Gracias Orfeo!
Que así sea, querido Josep. No se puede vivir sin espiritualidad. Esa es la costosa verdad a la que debemos llegar en esta época de tiranía de la racionalidad. Gracias por escribir.
Sin duda Dyer es para mi (es opinion personal) el más grande, su obra «El Cambio» es fantastica, creo que la he visto como 17 veces y siempre descubro algo nuevo en sus palabras, gracias.
A todos nos pasa lo que dices, Máximo. Te desvelo un pequeño secreto. En la Tarde de Máximo Potencial que organizamos en Valencia, tras ver la película por enésima vez, Javier Iriondo hizo un comentario similar al tuyo. En ese visionado conjunto que organizamos, Javier descubrió una enseñanza nueva y la explicó a los asistentes. Una delicia. Gracias por tu sentido comentario.