Todos en alguna ocasión nos hemos arrepentido de no haber formulado en un momento determinado algunas palabras. Quizás fue una disculpa que no salió de nuestros labios, un reconocimiento no ofrecido, o un simple «gracias» no pronunciado.
Las palabras son sin duda la fuerza más poderosa para conmover el espíritu humano. Y en muchas ocasiones, somos demasiado «avaros» con ellas a la hora de utilizarlas. Intenta expresar tus sentimientos positivos constantemente. Ahora es el momento de decir a esa persona especial «te quiero más que a nada en el mundo». Ahora es el momento de decir «gracias de corazón por tu amistad». Ahora es el momento de decir «eres una bendición en mi vida». Ahora es el momento de decir «gracias por todo lo que has hecho por mi». Ahora es el momento de pedir perdón de corazón. Ahora es el momento de eliminar todos esos «pesares» de tu corazón utilizando esas palabras y frases que nacen de lo más profundo del corazón.
Ahora es el momento, y no cuando esas personas ya no estén aquí, y te des cuenta de que jamás podrás decirlo de nuevo mirándoles a los ojos. Deja a un lado la timidez, la «vergüenza», la apatía,… y comienza a expresar a «pleno corazón» tus emociones. No caigas en la trampa de pensar que aunque no se lo digas, esas personas ya lo saben. Puede que lo sepan, pero te garantizo que les encantará escucharlo de tus labios. Puede que estés pensando «pero si son solo unas simples palabras». Si, pero unas simples palabras de tal poder que son capaces de conmover y transformar una vida para siempre.
Cada oportunidad que pasa, no vuelve. Hazlo ahora y empieza a llenar tu vida de la plenitud interior que aporta el hecho de comunicar siempre tus «palabras del corazón».
¡Haz sentir especiales a todas las personas que quieres con tus «palabras del corazón»!