Cinco claves poderosas para construir una mentalidad de éxito

Decía James Allen en su maravilloso libro «Como un hombre piensa» que «Un hombre es literalmente lo que piensa, y la suma de sus pensamientos es su carácter»… Me parece una frase de una profundidad y contenido tremendos. Literalmente lo que está diciendo es que nuestros pensamientos son la GRAN clave para transformar nuestra vida tanto como deseemos.

Así pues, veamos a continuación una serie de claves que pueden transformar tu manera de pensar hacia una mentalidad de realización y éxito. Si quieres transformar tu experiencia vital en positivo, estas ideas son un gran punto de partida:

1.-Aunque sientas el miedo, aprende a que sea un revulsivo para tomar acción.

Uno de los principales obstáculos entre cada uno de nosotros y los resultados que desearíamos producir son sin duda los diferentes miedos que nos retienen. Y no hablo aquí de esa clase de miedos relacionados con nuestra integridad física o supervivencia, sino me estoy refiriendo a toda esa batería de miedos tan comunes y que paralizan a tantas personas: miedo al fracaso, miedo al que dirán, miedo a que se rían de ti, miedo a fallar, miedo a no ser capaz de manejar la situación, etc…
Cuanto antes tomes conciencia de que los grandes realizadores suelen sentir exactamente los mismos miedos que tú, y que la única diferencia que te separa de ellos es que ellos, a pesar de sentir los mismos miedos, han aprendido a condicionarse mentalmente para dejarlos por un instante a un lado y tomar acción.
En muchas ocasiones esos miedos lo único que están indicando es justamente que estás en el camino adecuado, avanzando hacia tus sueños. En una vida sin riesgos ni acción, por descontado que no aparecerán esos miedos. Pero lo que tampoco van a aparecer jamás son los resultados que deseas lograr. Los miedos son un elemento natural de ese avance, y el hecho de que los sientas y aparezcan a lo largo del camino, lo que realmente te están indicando es «estoy avanzando», «me voy acercando a mis objetivos»… Haz del miedo un aliado, y utiliza cada oportunidad en la que aparezca como un instante de victoria y superación personal, superándolo a través de la acción.

2.-Valora que eres único y por tanto no necesitas compararte con nadie.

Otro de los errores que suele generar infinidad de pensamientos de falta de valía es la comparación constante con los demás. No caigas en ese error. Te garantizo que por muy brillante que seas en cualquier área de tu vida, siempre habrá alguien más brillante que tú en otras muchas áreas. Y la comparación, que siempre suele ser para detectar que nos falta o en que fallamos, lo único que termina generando es frustración.
Comienza a celebrar que tú eres único y especial. No necesitas compararte con nadie porque ciertamente eres incomparable. Jamás ha existido en toda la historia de la humanidad nadie exactamente igual a ti, y jamás volverá a existir. Y por ello es una pérdida absoluta de tiempo y energía entrar en una dinámica de comparaciones.
En lugar de ello celebra lo único que eres. Y utiliza la comparación en el sentido positivo. Busca ejemplos inspiradores en los que puedas ver reflejadas aquellas actitudes y habilidades que a ti te gustaría desarrollar y haz que te sirvan de inspiración. Se trata de verlo como una fuente de inspiración que te haga pensar «yo también puedo hacerlo» en lugar de lo que hace la gran mayoría que es frustrarse y pensar que jamás serán tan buenos como los demás.

3.-Haz una «dieta» de personas negativas.

Sin duda una de las cosas que más va a afectar tu mentalidad son las personas con las que pases más tiempo. En muchas ocasiones no somos conscientes de que cada relación que mantenemos en nuestra vida nos está afectando o bien de manera positiva o bien de manera negativa. Igual que sucede con una mala dieta, que si la mantenemos a lo largo del tiempo termina reflejándose en nuestra analítica perjudicando seriamente nuestra salud, sucede lo mismo con nuestras relaciones.
Existen relaciones que son «tóxicas» para tu actitud. Y generalmente es fácil detectarlas. Formúlate simplemente la siguiente pregunta después de pasar un rato con alguien: ¿Me siento mejor o peor que antes de ver a esta persona?
Si la respuesta suele ser que te sientes peor emocionalmente, estas ante una de esas relaciones que está afectando negativamente tu mentalidad y actitud. Empieza a hacer «dieta» de este tipo de relaciones y trata de pasar más tiempo con personas que te inspiren, te carguen de energía y te estimulen. La diferencia en tu actitud y mentalidad será tremenda.

4.-Empieza a esperar lo mejor de cada situación.

Existe una ley natural llamada la «ley de las expectativas». En resumen lo que esta ley de la naturaleza humana indica es que nuestros resultados en la vida están en relación directa con las expectativas de resultados que mantenemos. Es decir, esperar lo mejor de una situación, está maximizando las posibilidades de generar esa clase de resultados.
Y es algo que tiene una lógica total. Si tú esperas que suceda lo mejor ante cualquier proyecto o situación, fruto de esas expectativas vas a poner en juego todo tu potencial y emprenderás acciones poderosas para lograrlo. De este modo estás maximizando las probabilidades de que así suceda. Por el contrario, es bien difícil dar lo mejor de ti cuando ya partes de esperar que todo va a salir mal o que no serás capaz de manejar la situación. Por tanto, es evidente que existe una tremenda diferencia a nivel de lograr resultados partiendo desde una mentalidad de expectativa positiva o de una mentalidad de expectativa negativa. Comienza a situarte consistentemente en esa parte positiva y pronto descubrirás como tus resultados se revolucionan.

5.-La gratitud te sitúa instantáneamente en un estado mental de abundancia.

Para mi este es uno de los grandes «secretos» de la realización y la felicidad. Cuando mantenemos una mentalidad de «gratitud» en nuestra vida, nos estamos situando en la «autopista» de la felicidad. Es increíble como cambia nuestra perspectiva vital cuando comenzamos a tomar conciencia de lo afortunados que somos por todo lo que ya tenemos. Partiendo del simple hecho de estar vivos, nuestras familias, nuestros amigos y relaciones, nuestro cuerpo, nuestras aficiones, la naturaleza,… Son tantas las cosas por las que podemos experimentar esa maravillosa emoción de la gratitud que muchas veces lo pasamos por alto.
Suelo empezar cada día dando gracias de corazón por esa nueva oportunidad que representa el simple hecho de volver a levantarme y tener toda una jornada por delante para avanzar en mi vida. Toma conciencia de que por muy mal que hayan ido las cosas hasta ahora en tu vida, si sigues aquí, si estás vivo y respirando, cada instante de tu vida es una nueva oportunidad de comenzar de nuevo a construir la vida de tus sueños… Y ese simple hecho ya es merecedor de que te inunde una mentalidad de gratitud.
Deja de fijarte en lo mucho que crees que te falta y empieza a enfocar de inmediato en las innumerables bendiciones que ya posees en tu vida. Te garantizo que eso marcará un punto de inflexión en tu mentalidad y en tu vida.