0 comentarios de “«Somos dueños de nuestro destino. Somos capitanes de nuestra alma.» – Winston Churchill”
Ja dice:
William hentley
Más allá de la noche que me cubre
Negra como el abismo sin fin,
Agradezco a los dioses quienes quiera que sean,
Por mi alma inquebrantable.
En las garras de la circunstancia
No he parpadeado ni llorado alguna vez.
Bajo los golpes del destino
Mi cabeza sangra, pero erguida.
Más allá de este lugar de ira y lágrimas
Yace el horror de la sombra,
Aún con la amenaza de los años
Me encuentra y me encontrará sin miedo.
No importa cuán estrecho sea la puerta,
Cuán cargada de castigos la sentencia,
Soy el amo de mi destino:
Soy el capitán de mi alma.
Ante todo disculpas. Se borró la respuesta por error.
En el tema de las citas es muy difícil saber a ciencia cierta el origen de las mismas porque dependiendo de dónde de la encuentres, se detalla un origen u otro y aunque tratemos de asegurarnos, podemos errar.
En tu caso y con tu explicación no cabe duda y por un lado te agradecemos tu aportación y esperamos que aceptes nuestras disculpas por el borrado accidental.
Podrás ver que en otros casos también hemos dado las gracias por enmendar el error y no hemos «borrado» los comentarios.
Como ves, reponemos el comentario el comentario lo aprobamos con mucho gusto.
Un saludo
William hentley
Más allá de la noche que me cubre
Negra como el abismo sin fin,
Agradezco a los dioses quienes quiera que sean,
Por mi alma inquebrantable.
En las garras de la circunstancia
No he parpadeado ni llorado alguna vez.
Bajo los golpes del destino
Mi cabeza sangra, pero erguida.
Más allá de este lugar de ira y lágrimas
Yace el horror de la sombra,
Aún con la amenaza de los años
Me encuentra y me encontrará sin miedo.
No importa cuán estrecho sea la puerta,
Cuán cargada de castigos la sentencia,
Soy el amo de mi destino:
Soy el capitán de mi alma.
Ante todo disculpas. Se borró la respuesta por error.
En el tema de las citas es muy difícil saber a ciencia cierta el origen de las mismas porque dependiendo de dónde de la encuentres, se detalla un origen u otro y aunque tratemos de asegurarnos, podemos errar.
En tu caso y con tu explicación no cabe duda y por un lado te agradecemos tu aportación y esperamos que aceptes nuestras disculpas por el borrado accidental.
Podrás ver que en otros casos también hemos dado las gracias por enmendar el error y no hemos «borrado» los comentarios.
Como ves, reponemos el comentario el comentario lo aprobamos con mucho gusto.
Un saludo