¿Te has preguntado alguna vez si llegas a empatizar con los demás?
Me interesa sobremanera aprovechar al máximo el contacto con los otros, disfrutar y enriquecerme del vínculo emocional que se deriva de las relaciones personales, tan fundamental área en el desarrollo del ser humano, y de cuya esencia y derivada habilidad me gustaría dedicarme a tratar en unos cuantos artículos de ahora en adelante.
No hay nada tan satisfactorio entre personas como notar sintonía entre ellas, detectar de un modo cuasi subconsciente que se está a gusto con alguien, que tengas la pronta sensación de que te puedes fiar de ese de enfrente o que hay un interés al otro lado por recibir tu mensaje. En resumidas cuentas, ¡que les importas! Pues bien, las claves para convertirte en un gran dominador de la empatía pasan por ahí siempre, porque te importe sinceramente la gente con la que entables relación.
¿No te has parado a pensar por qué hay personas que suelen centrar la atención, que caen bien de entrada o que siempre saben gestionar las situaciones referentes a las relaciones personales? Yo sí que le he dado unas cuantas vueltas al asunto últimamente y, además, he leído al respecto cuanto ha caído en mis manos, y creo que ya va siendo hora de que me lance a compartir con vosotros esas conclusiones, deducciones o intuiciones que se me han generado en este tiempo.
De entrada, voy a dejar unas pistas en forma de verbos, de acciones que encapsulan el “Manual del especialista en empatizar con los demás”, de cómo nuestros actos nos predisponen delante de un desconocido, de tu pareja, de tus compañeros de trabajo, de tu mejor amigo, de tu hijo o del vecino de al lado para conseguir, a la mayor brevedad posible, un contacto más potente, más intenso y, por tanto, más amigable y mejor, o bien cómo reaccionar ante cada situación para que el resultado final de las mismas sea positivo para ambas partes y en función de tus deseos últimos:
Sonreír, Mirar, Saludar, Escuchar, Nombrar, Preguntar, Sincerarse, Ayudar, Comprender, Reflexionar, Apoyar, Ejemplarizar, Luchar, Sacrificarse, Dar, Recibir, Quererse, Querer y… volver a Sonreír.