A los seres humanos nos encantan los «trucos» y los «atajos». Tendemos a buscar casi siempre el camino de menos resistencia para todo. Buscamos la forma rápida y fácil de conseguir la recompensa. Los publicistas lo saben muy bien y por eso aplican consistentemente la estrategia de vender un producto como la solución milagrosa que nos proporcionará resultados rápidos prácticamente sin esfuerzo. Y como nuestra sociedad realmente ha asimilado esos mensajes como ciertos, cualquier cosa que requiera de un cierto grado de esfuerzo tiende a repelernos. Si no es rápido y fácil parece incluso que no es bueno… Y eso es algo que me parece tremendo.

Vale la pena que lo antes posible tomes conciencia de que los grandes proyectos y sueños no se consiguen a través de esa dinámica de trucos y atajos fáciles. Los grandes sueños suelen requerir de dosis enormes de perseverancia, esfuerzo, dedicación y pasión. Generalmente el camino hacia ellos está repleto de retos y obstáculos que superar, y cuando eso ocurre hemos de estar dispuestos a poner en juego toda nuestra capacidad de enfoque y dedicación. Es imprescindible empezar a utilizar a fondo esa obra magistral de la creación que es el cerebro humano.
Deja ya de una vez por todas de ir a la brusquedad del último truco o atajo y empieza a pensar por ti mismo. Si consigues aislarte por unos instantes de todo ese «ruido» ambiental que nos bombardea con estímulos por todos lados y comienzas a escuchar tu propia voz interior, empezarás a descubrir una fuente de sabiduría interna increíble. Nuestras intuiciones, cuando les damos la oportunidad de manifestarse y tomamos algo de tiempo para reflexionar sobre ellas, nos pueden aportar lecciones de increíble valor.

Comienza a desatar tu máximo potencial cada día proponiéndote el reto permanente de crecer y disfrutar mientras recorres el camino hacia tus sueños. Comienza a desarrollar un pensamiento crítico que te permita ir detectando aquello que funciona en tu estrategia y a la vez te permita cambiar y pulir todas las cosas que no estén funcionando. Si comienzas a hacerlo así, pronto te darás cuenta que ese «pensar por ti mismo» se comenzará a situar como el elemento fundamental en todo logro y avance en tu vida. Desarrollarás justamente la capacidad que nos diferencia de todo el resto de la creación, y como resultado comenzarás a «ser» más. Y eso es algo que lo cambia todo. Es la habilidad fundamental. Es la habilidad que todos los grandes realizadores y fuerzas del bien a lo largo de toda la historia de la humanidad han puesto en juego.

Desarrolla tu capacidad para pensar por ti mismo, y habrás dado un paso de gigante en tu desarrollo personal.

0 comentarios de “Empezar a pensar por uno mismo: una clave del verdadero desarrollo personal

  1. Josep Sanvisens dice:

    Si los trucos y los atajos sirvieran, todo el mundo seria un experto en lograr éxitos de todo tipo.
    Si que todos tenemos un potencial extraordinario, pero para desarrollarlo es imprescindible la acción con disciplina y constáncia, lo cual supone un precio que a veces no estamos dispuestos a pagar. Además, sin entusiasmo y pasión este precio siempre nos parecerá demasiado caro.
    GRACIAS JOSÉ Mª.

    • jmvicedo dice:

      Has remarcado quizás uno de los elementos más importantes que es nexo de unión con nuestra realización y felicidad: disfrutar cada instante del camino con entusiasmo y pasión. Cuando esos ingredientes entran en juego, en sintonía con nuestro propio criterio todo se transforma. No es necesario esa búsqueda constante de atajos y el camino de menor resistencia. Simplemente uno comienza a disfrutar cada una de las etapas y retos que se van presentando en el camino porque los entiende como parte del proceso natural de crecer y desarrollarse. Y ahí es cuando toda la magia comienza a suceder.
      ¡Muchas gracias por el comentario y un fuerte abrazo!

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