Viendo anoche una buena película que retrataba la complejidad implícita en las relaciones personales, surgió una reflexión que me hizo meditar y que venía a decir: “…el ser humano es el único animal que desoye la experiencia en múltiples ocasiones porque existe en él la esperanza…”

Si de alguna manera se suele nombrar al conjunto de experiencias que acumulamos por el mero hecho de vivir o, además, a alguna vivencia de especial intensidad que nos haya marcado para siempre el rumbo es, curiosamente en ambos casos, la expresión experiencia vital, unos términos que carecen de cualquier rigor científico, pero que habitan en el argot colectivo y nos sirven a todos para ubicarnos. 

Por otro lado, cuando se habla de esperanza de vida siempre se tiende a pensar en las gráficas que nos adelantan la media de años que vamos a vivir si somos mujeres u hombres y si vivimos en un lugar u otro del planeta. Es una media aritmética resultante de la toma de datos, es un proceso totalmente científico, pero que, también curiosamente, a mí no me dice nada relevante ni me sirve para ubicarme.

Creo que esperanza de vida debería ser la capacidad de actuar sin pausa para, así, esperar de sus derivadas que las cosas sucedan en la vida de tal manera que nos congratulen y reconforten tanto que merezca la pena el haberla vivido, sin duda alguna. 

De entre los significados de vital como adjetivo de la experiencia, es decir, entre vitalicio por un lado y básico o fundamental por otro, propongo unirlos y que la experiencia de vivir en sí misma, la experiencia vital, sea tan valorada que durante toda ella se encuentre cada momento como básico, como necesario, pues no hay nada más cierto, además, y que ese parecer nos lleve al disfrute continuo.

En resumen, de la fantástica reflexión original del film deduciría que siendo cierta para mí en un cien por cien, no lo es menos que van unidas a la vida la experiencia y la esperanza en un binomio perfecto que garantiza el movimiento y la transformación, o sea, experiencia + esperanza = vida.

0 comentarios de “Experiencia vital vs esperanza de vida. La reflexión de José Manuel

  1. Josep Sanvisens dice:

    Recuerdo la frase de: No podemos añadir años a nuestra vida, pero podemos añadir vida a nuestros años.
    José Manuel, has descrito una fórmula que es toda una filosofia de vida, con tu permiso, la adapto para mi con esta idea: La vida es maravillosa, si tomamos como básica la experiencia de cada momento, mas la esperanza en un buen futuro, basada en nuestra capacidad de actuar sin pausa.
    GRACIAS POR ESCRIBIR

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